Swallow The Sun - Plague of butterflies (2008)

1. Plague of Butterflies (34:42)

I. Losing the Sunsets
II. Plague of Butterflies
III. Evael 10:00

2-5. Out of this gloomy light (demo 2003)

2. Through Her Silvery Body (08:01)
3. Out of This Gloomy Light (05:34)
4. Swallow (05:27)
5. Under the Waves (06:36)

Tras cinco años de existencia como banda y tres discos de estudio (más una maqueta y un par de singles), los finlandeses Swallow The Sun sacaron el pasado mes de septiembre su primer EP, que consta de una nueva canción dividida en tres partes, más las cuatro canciones de su primera y única maqueta.

"Plague of butterflies" fue compuesta originalmente para un ballet (¿el Deviare?... pues no lo sé), de ahí que sea conceptual y tan larga. Al final el proyecto se fue al garete, pero ellos siguieron adelante con la canción y dicen que en el futuro la van a usar para un cortometraje o algo así. La grabación estuvo repartida en cuatro estudios: en el primero guitarras (curiosamente), en otro percusión, luego teclados y por último voces y bajo.

Music was originally ordered from us for a really interesting and big project, but the project was sadly abandoned. Because of this we are planning to use the music in different context - namely in a short movie - and we are in search for suitable partners to make this happen. We'll give more info on this later as things move on and wheels start to roll.

Respecto a la maqueta, data del año 2003 y sólo se hicieron tres copias, todas las cuales fueron enviadas a discográficas, por lo que era muy difícil de conseguir; aunque luego regrabaron todas las canciones para incluirlas en su debut The morning never came. Los cuatro temas que en ella incluyeron son bastante definitorios de lo que es el sonido del grupo, salvo por un detalle: en ellas sólo hay voz gutural gravísima, mientras que en composiciones posteriores suele haber también voces rasgadas y limpias, aunque en menor proporción. Por lo demás, anticipan lo que harían en siguientes lanzamientos: un doom metal (o death/doom, no se me enfaden los puristas) hecho de composiciones lentorras y depresivas, acompañadas de melodías de una gran belleza melancólica. Me gusta sobre todo el melódico principio de "Swallow", aunque hacia el final no me gusta tanto. Aquí tenéis dos canciones para escuchar: "Through her silvery body", que es la que más me gusta de la maqueta (y la más lenta también), y un fragmento de "Losing the sunsets".




Bueno, vamos a analizar "Plague of butterflies", que es lo que más miga tiene. Siento debilidad por las composiciones largas y variadas, y también por las historias contadas con música, y aquí hay las dos cosas... Aunque se supone que es una canción muy larga, en realidad son tres canciones claramente diferenciables, que juntas conforman una historia. Dicho de otra manera, una composoción conceptual formada por tres canciones cuyas letras están estrechamente relacionadas (cuentan el principio, el desarrollo y el final de una historia) pero que musicalmente son diferentes. En ese sentido puede compararse al "Achilles" de Manowar. La primera parte comienza con sonidos de mar y viento; pronto se les une una sencilla melodía de guitarra acústica y un teclado ambiental, más tarde otra guitarra, otra línea de teclado, hasta que hacen explosión la distorsión y la percusión, siguiendo básicamente con la misma melodía de antes; se van incorporando elementos y matices y desarrollando la melodía hasta llegar casi a los cinco minutos, momento en que se vuelve a la austeridad inicial y comienza a oírse una voz baja, que lentamente va contando en primera persona la historia de un hombre que está en el bosque un frío anochecer, rodeado de quietud y silencio. El hombre se siente triste y solo, y llega a escuchar una voz en su cabeza, susurrando; siente su sangre cada vez más fría, y desea que alguien venga junto a él. Entonces piensa en su amada Evael, quien para él es la luz, la que trae las mariposas, y la antítesis de todo lo que le rodea en ese momento. Ahora es cuando entra por primera vez la voz gutural, acompañada de muchos graves: justo cuando la noche se cierra totalmente. La melodía también se hace más oscura, y así se mantiene mientras el Bosque, interpretado por un coro que parece lejano, acompañado de teclado y doble pedal, canta lo que podemos llamar estribillo de esta primera parte: "Estás perdiendo las puestas de sol y nunca las recuperarás. Los días que pasas en soledad son segundos en sombras de negrura", esto último doblado por una voz rasgada, la única que aún no había aparecido. De nuevo la voz gutural, después otra vez el estribillo; la música ya se hizo totalmente oscura y sobrecargada, mientras el hombre se siente cada vez más viejo y solo. Llegando al final de esta primera parte, la melodía vuelve a ser la de hace cinco minutos, manteniéndose mientras la voz rasgada del Bosque le dice al hombre que ella es ahora propiedad del Invierno, y ganando algunos matices, hasta que vuelve la melodía del inicio hasta que llega el final de "Losing the sunsets". En algunas partes, esa melodía intermedia hasta me recuerda a algún momento de "Varjojen virta", de ciertos compatriotas suyos...

Con un piano casi gótico empieza "Plague of butterflies", pronto interrumpido por todos los demás instrumentos y una voz desgarradora que narra cómo el hombre regresa a su pueblo y observa cómo todo el mundo se va, con miedo reflejado en sus caras, escapando del frío y la plaga. Esta parte es bastante rápida. Muchos cadáveres congelados quedan atrás; él sigue, incansable, buscando la cara de su amada Evael, sin éxito. Entra en su casa y enciende una luz junto a su ventana, aunque ya perdió toda esperanza. Diría que esta segunda parte es musicalmente la más oscura de las tres, pues posee muchos graves, la distorsión está presente en la mayor parte de la misma y carece de voz limpia. Sólo cuando el hombre se echa a descansar (observando el ballet de las sombras bailando a través de la llama de su vela, mientras cierra los ojos y suspira por no volver a despertar), la música se queda de nuevo en su esqueleto de piano, guitarra acústica y mínimos bajo y percusión. La calma dura casi minuto y medio, hasta que abre los ojos de nuevo, pues a pesar de todo, y como todas las noches, la muerte no vino. Una mariposa sigue danzando alrededor de su vela; "¿pero por qué estás aquí, cuando Evael está perdida todavía?". Y tras otro rato de ruido, bruscamente el hombre se duerme.

Mar, olas, viento. Un río. Guitarra acústica acompañada de un violoncello. Casi tres minutos más tarde, vuelve poco a poco la melodía que tan repentinamente se cortó antes. "La mañana vino con su fría caricia; te maldigo, luz, por despertarme de nuevo." La vela se consumió y las alas están quemadas al pie de la misma. Entonces decide ir de nuevo al bosque; esta parte, aunque intervienen todos los instrumentos, es mucho más lenta y la voz es profunda y cavernosa. Lentamente termina.

"Evael 10:00", una vez más, empieza con una guitarra acústica y luego llegan el resto de instrumentos, esta vez con la melodía más triste de todas. Vuelve la calma, una voz limpia continúa la historia. Otra vez de vuelta en casa, otra vez la búsqueda fue infructuosa, otra vez se acuesta a dormir. Música saturada de nuevo. Esta noche la desesperación es insufrible, más que nunca el hombre desea morir, y la voz rasgada le implora a Evael que, habiendo ya la plaga limpiado el mundo, le libere. Otra vez calma y voz limpia. Su Sueño, como el Bosque en la primera parte, le dice que la perdió para siempre, y que ahora sólo cabe estar solo.

Música saturada lenta. Un ruido en la puerta le despierta; hay luz y la habitación se llena de mariposas. Abre la puerta, y ella cae en sus brazos. Cuidadosamente la tumba en la cama; entonces Evael susurra: "Estuve perdida en el bosque y los árboles me mantenían alejada de ti. Pues yo traje la plaga con ellas, con las mariposas."

Durante los minutos que quedan, la música, melancólica, se desarrolla hasta dar paso a un piano los últimos segundos y terminar definitivamente. Ambos cierran sus ojos; juntos desaparecen, se van lejos del dolor, por la profundidad de la noche protectora, hacia un sueño penitente. Y hasta un minuto después de medianoche, la habitación estuvo llena.


Llena de mariposas.